Educación Inclusiva

Módulo 5: El sistema Braille

Didáctica del sistema braille

Aspectos a tener en cuenta

Es interesante pararnos a analizar mínimamente algunas particularidades del sistema (Fernández del Campo, 2001), que es necesario tener en cuenta de cara a la metodología y recursos materiales a utilizar con los alumnos:

Material utilizado

  1. Papel braille: es agradable al tacto y económico, pero precisa de ciertas condiciones de almacenamiento para evitar perder la calidad inicial del punto. Por ello es importante, a la hora de almacenar los libros y hojas escritas no apilarlos en vertical, para no aplastar el punto, lo cual repercutiría negativamente en la lectura.
  2. Papel plástico (Thermoform): la calidad del punto se mantiene inalterable al paso del tiempo, pero es desagradable al tacto a causa de la electricidad estática que desprende con el rozamiento.

Calidad del punto

La calidad del punto braille en cuanto a dimensiones, forma, regularidad, persistencia o durabilidad son variables que influyen en la comprensión y velocidad lectora. En términos generales podemos afirmar que:

  1. A mayor distancia entre puntos, menor velocidad. La distancia varía poco según el método de escritura analizado (escritura manual, a máquina o con impresora braille), pero se encuentran algunas diferencias.
  2. Los puntos con más relieve son los que se realizan con dispositivos electrónicos y mecánicos (un 42% de más altura), lo cual repercute en una mayor percepción y menor presión, lo que aumenta la comprensión y velocidad lectoras.
  3. La regularidad del punto influye también ya que cuando su superficie es muy irregular el deslizamiento de los dedos es más difícil y fatigoso (el ejemplo más claro lo tenemos en la diferencia al escribir en pauta y en Perkins). La impresión en interpunto (por las dos caras del papel) suele tener consecuencias negativas en cuanto a la calidad del punto.
  4. La calidad del punto y las características del papel o soporte determinan la resistencia al aplastamiento. Hay alumnos que presionan tanto el papel que dejan ilegible el texto.

Presentación de escritos

La presentación formal de un escrito en braille debe cumplir ciertas normas para evitar confundir al lector y ayudarle a orientarse en el texto:

  1. Sangrías: se aconseja dejar dos espacios en blanco al comienzo de párrafo o detrás del punto y aparte.
  2. Títulos: deben estar centrados, con una línea en blanco superior y otra inferior. La primera letra del título en mayúscula (en general, se abusa de las mayúsculas, subrayados, enmarcados y cursivas que, en vista son útiles, pero en braille hacen disminuir la comprensión y velocidad lectora).

    detalle de dos manos leyendo simultáneamente en braille

    El material, la calidad del punto o la presentación de los escritos son aspectos a tener en cuenta en la didáctica del sistema braille. Fuente: Banco de imágenes de la ONCE.

Otros aspectos

Además de los aspectos ya reseñados, existen otros relacionados con los aspectos físicos que son especialmente importantes porque pueden afectar a la velocidad de lectura y sobre todo a la fatiga, algunos de los cuales son comunes para la lectura en tinta.

  1. Realizar ejercicios de calentamiento y relajación previos a la lectura, para evitar una tensión excesiva y prevenir posturas inadecuadas. Son ejercicios de flexión y extensión de manos, dedos y muñecas y separación de dedos.
  2. Los pies deben reposar sobre el suelo o sobre un soporte fijo, a una distancia adecuada. La altura del asiento debe ir en consonancia con la mesa y la estatura del alumno.
  3. El tronco debe permanecer erguido, apoyado en el respaldo del asiento y los antebrazos y codos deben descansar sobre la mesa o el libro.
  4. Relajación general de piernas, tronco, brazos, manos, muñecas, etc.
  5. Respiración acompasada y relajada.
  6. Relajación de todos los órganos de fonación y articulación.
  7. El frío y la humedad dificultan la percepción. Por ello, es recomendable tomar algunas medidas higiénicas como lavarse las manos con agua tibia.
  8. Toda la superficie de la yema de los dedos es susceptible de percibir los puntos, no sólo la parte terminal, de ahí que la postura de la mano sea muy importante. Es decir los dedos no deben estar curvados, ni las muñecas elevadas sobre el papel.
  9. La presión de las yemas de los dedos sobre el papel, debe ser suave para que el desplazamiento sea más rápido y ágil y evitar la fatiga. Para conseguir esta presión adecuada, la mano y el antebrazo deben estar apoyadas en el libro o la mesa.
  10. Todos los dedos de ambas manos son aptos para la lectura. Incluso el meñique y el pulgar pueden colaborar en la lectura, anticipando los finales de línea, de párrafo o de página.
  11. Numerar de 1 a 6 los puntos del signo es para facilitar la comunicación y para resolver dudas. Se recomienda no enseñar la numeración hasta que el alumno conozca la mayoría de las letras al tacto de forma global. Es mejor acudir a términos como arriba, abajo, derecha o izquierda.

Las distintas letras se perciben de forma distinta al tacto, en función de la frecuencia de aparición, del número de puntos de que conste el signo, de que el signo contenga los puntos 3 ó 6, que son más difíciles de percibir, o de que los signos tengan puntos simétricos, como pasa con las letras e, i / f, d /h, j/q, ñ etc. La longitud de las palabras también influye en los lectores, sobre todo en los más inexpertos.

Como ya se ha mencionado, los trabajos y estudios consultados coinciden en afirmar que la lectura en braille es más lenta que la lectura en tinta, que el braille se percibe carácter a carácter y no puede leerse de forma globalizada y que produce fatiga. De hecho, se observa una tendencia a emplear cada vez menos el sistema tradicional, quizás por la existencia de otros medios, relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación:

  1. Dispositivos destinados a posibilitar el acceso a la informática y a Internet (ampliadores de caracteres  y gráficos en la pantalla de ordenador, lectores de pantalla y líneas braille)
  2. Dispositivos destinados a permitir la lectura de textos en soporte digital (ampliadores electro-ópticos, dispositivos de reconocimiento óptico de caracteres -programas OCR-)
  3. Dispositivos que permiten la escritura y la impresión en braille (anotadores electrónicos parlantes, impresoras braille)
  4. Otros dispositivos (libro hablado o magnetófono, etc.)