Educación Inclusiva

Módulo 2: Intervención Educativa

Introducción

Se presenta en este módulo el modelo de intervención educativa que se lleva a cabo en España con la mayoría de los alumnos con discapacidad visual. El propósito es que se conozca esta propuesta de intervención que está posibilitando la inclusión académica y social de los alumnos con discapacidad visual.

La Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE) es una institución de carácter social y democrático, sin ánimo de lucro, que tiene el propósito fundamental de mejorar la calidad de vida de las personas con ceguera o deficiencia visual de toda España.

La ONCE comenzó su andadura en 1938. Tras el decreto fundacional en mayo de 1939, celebró su primer sorteo del cupón, que dio trabajo a las personas con ceguera y recursos económicos a la organización.

En la década de los cuarenta y cincuenta se apostó por la educación en centros educativos y bibliotecas específicos para niños con ceguera.

En los años sesenta, se continuó fomentando la diversidad laboral y se crearon la Escuela de Telefonía, un centro de formación profesional y la Escuela Universitaria de Fisioterapia.

Gracias a la nueva gestión democrática y las iniciativas tomadas con la venta del cupón en los años ochenta, se pudieron poner en marcha proyectos que hicieron que la ONCE ocupara un lugar muy importante entre las organizaciones de y para personas con ceguera de todo el mundo.

Vendedora del cupón de la once en su quiosco.

La venta del cupón de la ONCE permite la puesta en marcha de numerosos proyectos en beneficio de las personas con discapacidad. Fuente: Banco de imágenes de la ONCE

A partir de entonces se inauguraron nuevas instalaciones y nuevos servicios: delegaciones territoriales, direcciones administrativas, el Servicio Bibliográfico de la ONCE (SBO), Centros de Recursos Educativos, Centro de Investigación, Desarrollo y Aplicación Tiflotécnica (CIDAT), la Fundación ONCE del Perro-guía, etc.

En 1988 se crea la Fundación ONCE, para la cooperación e integración social de personas con discapacidad.

En 1993 nace la Federación Española de Deportes para Ciegos (FEDC) para dar impulso renovado a los deportistas afiliados. También en este año comienza su andadura la Corporación Empresarial ONCE (CEOSA).

En 1998 se crea la Fundación ONCE para la solidaridad con las personas ciegas de América Latina (FOAL) que coopera para mejorar la calidad de vida de las personas ciegas en  América Latina, a través de programas educativos, de empleo, de formación o de rehabilitación.

Actualmente, para llevar a cabo su labor cuenta con el apoyo de la Administración Pública a través de los Ministerios de Economía y Hacienda, Asuntos Sociales e Interior.

Se trata de una organización que participa en diversos foros nacionales e internacionales sobre ceguera y discapacidad, promoviendo también distintas iniciativas para lograr su función. Además, para que las personas con ceguera o discapacidad visual puedan integrarse por completo en la sociedad, la ONCE desarrolla programas educativos y de formación, de prevención de la ceguera, de investigación en los más diversos campos, y de autonomía  personal.

La ONCE aspira a mejorar año tras año su capacidad comercial, renovándose y apostando por el futuro en todos los ámbitos y mejorando la capacidad de la organización para mantenerse y crecer en el sector del juego.

Desde su creación, esta organización presta atención educativa a las personas con grave deficiencia visual o ceguera.

Al principio, los colegios de la ONCE eran la única opción educativa para los alumnos con ceguera o deficiencia visual grave. En la actualidad, la mayoría (más del 98%) de estos niños y niñas están escolarizados en colegios ordinarios, en su pueblo, barrio o ciudad, y reciben una atención complementaria que responde a las necesidades educativas específicas derivadas de su situación visual. Para ello, cuentan con los recursos establecidos en los convenios de colaboración entre la ONCE y todas y cada una de las Administraciones Educativas.

En la mayoría de sistemas educativos del mundo la educación de los niños con discapacidad visual se realiza en centros escolares ordinarios, con el apoyo de recursos especializados (humanos y materiales), que se adecuan a las necesidades específicas de estos alumnos.

Un grupo de niños videntes y una niña con ceguera realizan una actividad con el ordenador.

En la mayoría de los casos la integración de niños y niñas con ceguera se hace en centros ordinarios con recursos materiales y humanos especializados. Fuente: Banco de imágenes de la ONCE.

En las diferentes Comunidades Autónomas españolas el modelo educativo de atención a personas con discapacidad visual es inclusivo y se caracteriza por la escolarización en centros ordinarios de estos alumnos, con el apoyo que prestan los equipos específicos a través de la itinerancia, porque pensamos que es el modelo que mejor responde a las necesidades educativas de estos alumnos.

Amplía: Un poco de historia
Valentín Haüy fundó en 1784, en Francia, la primera escuela para ciegos que hubo en el mundo. Hasta entonces, no eran muchos los que creían en la posibilidad de que las personas sin vista pudieran ser educadas e instruidas.
En España el ejemplo de Valentín fue seguido en 1820 por José Ricart, que fundó en Barcelona una escuela para ciegos.
En 1857, Claudio Moyano dicta una ley de enseñanza donde dispone que en todos los distritos universitarios se cree una escuela de sordos y ciegos. A partir de aquí se fundan distintos centros.
En 1938 se crea la ONCE, quien va absorbiendo las escuelas existentes y establece cinco centros en España, en régimen de internado.
Con el tiempo, las escuelas especiales se fueron abriendo más a la sociedad, para fomentar la integración social, los contactos entre los alumnos, las asociaciones de padres, etc.

A partir de la década de los setenta, comienzan a producirse cambios sociales, económicos, que producen un nuevo planteamiento sobre la formación de las personas con discapacidad visual, apareciendo los primeros intentos de integración escolar de alumnos con discapacidad visual en centros ordinarios y la creación de equipos de apoyo a la enseñanza integrada.

En la actualidad, más del 98% de los alumnos con discapacidad visual están escolarizados en aulas ordinarias. Los colegios específicos de la ONCE se han ido transformando en Centros de Recursos Educativos, que cuentan con los recursos y la experiencia suficiente como para ser los soportes técnicos de apoyo en cada zona. El objetivo es dar respuesta a las necesidades derivadas de la discapacidad visual y contribuir a la mejora de la atención de las mismas.